A primera vista, un diván es un cómodo aporte para tu salón, dormitorio u oficina en casa. Pero mirando todo lo que representa un diván, es mucho más. Desde el siglo XVII, cuando los franceses lo popularizaron como una pieza destacable, el diván o chaise lounge como lo conocemos hoy, es un signo de elegancia y lujo.
También conocido como chaise longue, el divan se ha desarrollado con el tiempo y adaptado al uso de exterior. Desde una pieza elegante hasta un mueble de consulta de psicólogo, el diván llegó a nuestros hogares. Algunas personas se preguntan cómo elegir el diván adecuado. En esta guía de compra, analizaremos todos los aspectos a considerar para encontrar el diván adecuado.
Diferentes tipos de divanes - encuentra el tuyo
Dado que el diván tiene una historia tan fascinante, evolucionó y cambió con el tiempo. Pero, ¿por qué es tan popular el diván? Ofrece la comodidad de un sofá, pero el tamaño reducido lo hace apropiado en todas las distribuciones. La variedad de estilos permite que un diván combine con cualquier tipo de decoración interior, desde las clásicas hasta las modernas. Los más populares son:
El diván sin reposabrazos - este tipo de diván tiene un respaldo en un extremo. La sencillez del diseño permite diversas formas de colocarlo. Se adapta básicamente a cualquier lugar, aunque a lo largo de una pared es la manera perfecta de diseñarlo cuando se busca ahorrar espacio. El respaldo puede ser ajustable, lo que lo hace muy cómodo para leer o maratones de películas.
El diván con reposabrazos, o de estilo victoriano, este diván se convertirá en la estrella de la habitación. Su único reposabrazos atraviesa el respaldo y llega hasta la mitad del diván. Colócalo contra una pared para ahorrar espacio y enriquecer tu decoración.
Diván con dos reposabrazos– hecho especialmente para tumbarse, este diván es perfecto para tu sala de estar. Su posición relajada permite no solo momentos de relax frente al televisor, sino que también es perfecto para las siestas de la tarde.
Divanes de dos extremos - conocido como Recamier, tiene dos extremos elevados. Aunque no es la mejor opción para recostarse cómodamente, el recamier robará el foco de atención donde sea que lo coloque.
Cómo diseñar y colocar tu diván
Ahora que conoces las opciones disponibles para comprar una chaise longue, el siguiente paso es diseñar una que se adapte a tu hogar. Un diván no es difícil de integrar en tu decoración.
Aunque es un mueble impresionante por sí solo, funciona muy bien en la mayoría de las habitaciones. Si estás pensando en qué dirección debe mirar un diván, debes comenzar por considerar el flujo de circulación de la habitación. Coloca el diván en un lugar tranquilo y déjelo crear un rincón íntimo. Dependiendo del tipo de diván, puede encajar bien contra una pared o frente a una ventana, al lado de una mesa de centro.
Si eliges uno sin reposabrazos, comprender cómo colocar un diván es algo natural. Opta por una zona de relax equilibrada y combínalo con tu sofá modular. Si no sabes cómo elegir un sofá modular a la izquierda o derecha al colocarlo, piensa dónde quieres que esté la esquina del sofá. Ponlo mirando hacia la entrada u otro foco de atención (TV, chimenea) para un espacio de descanso acogedor y aireado.
Para diseñar un espacio cómodo para relajarte, ten en cuenta el diseño de tu habitación para determinar de qué lado debe estar el diván. Normalmente, el respalso o reposabrazos pueden bloquear el flujo de la habitación y actuar como una pared de separación. Por lo tanto, asegúrate de optar por colocarlo contra una pared o una zona menos circulada. Deja suficiente espacio para el acceso y combínalo con una lámpara de pie o una mesa auxiliar.
¿Cuál es mi estilo? - el color y el material correctos
Ahora hablemos un poco sobre esos detalles que marcan la diferencia a la hora de elegir un diván: material, color y estilo. Según tu estilo de decoración, tienes muchas opciones para elegir.
Si te gustan las líneas minimalistas limpias o el estilo industrial, elige colores neutros para tu diván. Opta por uno que involucre patas sencillas con poco o ningún adorno, o un sofá con estructura de metal. En términos de materiales, el cuero o el ante pueden hacer una declaración, independientemente del color.
Los amantes de un estilo romántico de inspiración francesa disfrutarán añadiendo un diván a su hogar. Los tapizados con patas o reposabrazos detallados son la elección correcta, especialmente en colores claros. Opta por el terciopelo, no hay nada mejor. Si buscas alegrar la habitación de una manera lujosa, recomendamos colores vivos.
Aquellos que aprecian un enfoque clásico y atemporal, deberían considerar un estilo inspirado en un Chesterfield para un diván. Esta elegante opción funciona bien en todos los colores posibles, siempre que siga el flujo de la habitación. Los acabados de lino también son excelentes, especialmente cuando se combinan con ricos detalles decorativos en las patas de madera.
Dependiendo de la frecuencia de uso, al elegir el material de tu diván ten en cuenta el estilo que amas, pero también su durabilidad. Seda, terciopelo, ante o cuero, estos materiales son excelentes, pero necesitan un cuidado extenso para disfrutar de su belleza eterna. La microfibra y el poliéster ofrecen una gran comodidad y son fáciles de mantener, si tienes niños o mascotas, o simplemente te encanta sentarte en tu diván todos los días. Para encontrar más opciones que satisfagan tus necesidades al elegir el diván adecuado, te invitamos a descubrir nuestros favoritos a continuación.
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